Metrobus

Es oportuno que, luego de numerosas acciones que se realizan en Argentina para tratar de lograr un cambio en el sistema de tránsito en el que nos movemos actualmente, recordar algunas directivas impartidas por el Consejo Empresarial Mundial para el Desarrollo Sostenible (WBCSD.)

Dicho Consejo, tomando como base trabajos realizados años atrás, presenta la movilidad como un motor de desarrollo social y económico y afirmando que la clave de una movilidad sustentable puede lograrse en en un mundo en desarrollo.

Ya en el año 2004 la industria automotriz a través de empresas como Ford, General Motors, Toyota, Honda entre otras, vienen trabajando para alcanzar una movilidad sustentable que se define como  “la capacidad de cubrir las necesidades de la sociedad de trasladarse libremente, comunicarse, comerciar y establecer vínculos sin sacrificar valores humanos y ecológicos”

Para tal fin hay siete objetivos que en el año 2009 fueron analizados en en un trabajo que se denominó “Mobility for Development” que se apoyó en la investigación, diálogo y aprendizaje entre ciudades concluyendo que, la movilidad urbana tal como la conocemos hoy es insostenible;  y si se desea alcanzar la sustentabilidad dentro de cincuenta años, es necesario modificar los sistemas de transporte urbano con premura.

El objetivo final es acelerar y ampliar el acceso a la movilidad segura , fiable y cómoda para todos  con cero accidentes de tráfico, bajo impacto ambiental y reducción de la utilización de energía y tiempo facilitando el movimiento de personas y mercaderías  lo que redundaría en una sociedad  con mayor equidad, nuevos valores y empresas , y un ciclo de crecimiento ambiental y económico positivo.

Un desafío que enfrenta América Latina es el de resolver la congestión del tránsito, reduciendo el impacto ambiental y los accidentes viales.  Para resolver este desafío, Filippo Veglio, Director Development Focus Area del WSCD afirma que  es necesario conjugar la construcción de calles, mejorar del transporte público y lograr una mejor aplicación de las normas de tránsito aunque destaca que ninguna ciudad ha encontrado una receta universal que de respuesta a la congestión y los accidentes.

Veglio no deja de señalar también que se requiere un compromiso político y una combinación de acciones entre los gobiernos municipales, estatales y federales  y el compromiso del sector privado, dado que no se encontrarán soluciones sin esa mutua colaboración. También es necesario nuestro propio compromiso personal desarrollando la capacidad de colaborar con la mente abierta para aprender y trabajar con otros. Todos debemos asumir la responsabilidad de nuestras decisiones personales con respecto a la utilización sostenible de los servicios de transporte

En el escenario también  incluye a las empresas que tienen un papel clave que desempeñar ya que pueden ofrecer productos y servicios innovadores y una infraestructura de transporte eficiente seguro y limpio con servicios que satisfagan las necesidades humanas para la movilidad de una manera más sostenible. Pero si bien las empresas pueden brindar soluciones, necesitan de condiciones políticas, regulatorias y financieras que las hagan posible. Sin esa colaboración no seremos capaces de encontrar soluciones

El mayor desafío para los próximos años será crear nuevos sistemas de transporte para disminuir la necesidad de vehículos privados en zonas urbanas de alta densidad.

Estos cambios ya han comenzado a notarse en la Ciudad de Buenos Aires, el Gobierno de la Ciudad ha implementado varias acciones para contribuir a la movilidad sustentable http://movilidad.buenosaires.gob.ar/

María Inés Maceratesi
Fuente: ComunicaRSE